domingo, 5 de abril de 2009

Ratoneando

Llevaba toda la mañana viendo como evolucionaban las nubes y como de vez en cuando el sol picaba. "Si sigue así habrá tormenta", me comenta mi compañero mientras mira por los prismáticos en busca de algún pequeño conato de incendio.
Tormenta, despues de tantos dias de anticiclón, casi me suena a utopía, aunque muy deseada. No es normal estar a principios de temporada y que los ríos estén bajos, haga un sol de carajo y no caiga una gota de agua. ¿Quién dijo que en Galicia llovia mucho?

La mañana se me hace eterna. Cada vez más nubes y a ratos pica de nuevo el sol. Pasamos media docena de veces por encima de ese riachuelo y no puedo por menos que ir planificando la estrategia de pesca para cada corriente que veo. Por fin son las dos!! Salgo del trabajo tan contento como cúan reo recobrando la libertad. Comida rápida a base de pasta y atún y a las dos y media estoy a pie de río.
Nada más meterme en la ribera me maldigo una vez más por no haberme traido las cañas pequeñas, ésta de nueve pies casi no coge en este riachuelo y en Galicia ya no es la primera vez que se me queda grande.
El agua transparente a más no poder,pero el río muy bajo, necesitaré bajos largos para evitar el dragado y lances a media distancía pues me he dado cuenta que estas truchas te ven desde muy lejos. Pero... demonios!! el río no es un río, es un arroyo, como narices voy a lanzar siquiera a ocho metros ¿?
Poco a poco voy pescando las posturas, aunque muchas las tengo que dejar por imposible o pescarlas mal, apenas hay sitio donde volar la linea. Veo una cebada, desproporcionada para el río que es. Es una salida de un pocito de un metro de profundidad más o menos. Están volando algunas efémeras grandotas y marrones asi que pongo un parchute con cuerpo marrón en biot de oca y poste blanco. Lanzo, posa, deriva y.... zaaassss!!! la ha tomado en el mismo sitio que la cebada. Clavo y ¡como tira! veo un pez no muy grande peleando como un descosido en el pocito; un fantasma plateado salta dos veces fuera del agua y se suelta. ¿Qué coño es eso? ¿Un reo? No es descabellado, el riachuelo muere en el mar... Da igual lo que sea, yo ya estoy contento.
Voy pescando animado todo el riachuelo. La mayoria de las veces tengo que lanzar con la caña desmontada a la mitad. Sigo la misma estrategia para cada pozo: la salida la pesco a seca al igual que los laterales de la corriente, luego lanzo a la corriente y por último quito la seca y le meto una ninfita de cabeza dorada. Clavo algunas a seca (elk caddis naranja y parachutes marrones) y otras a ninfa (faisán). Revuelco más que saco, estas pequeñas son rapidísimas. La mayoría son chicas, pero algunas que revuelco tienen buen tamaño y casi siempre salen en las posturas más apetecibles. Lástima que estos riachuelos perdidos no son respetados ni en talla ni en veda. Aún así logro revolcar (que no sacar) docena y media de truchas.

Dice un amigo que "el peor dia de pesca es preferible al mejor día de trabajo" y estoy totalmente de acuerdo con él, aunque hoy no lo considero un mal día, eso si, ha sido una jornada trabajada: he cambiado un motón de veces la mosca, los bajos, los tippet y he perdido un montón de moscas, pero asi es la única forma de pescar, arriesgando. Perdonad que no diga el nombre del riachuelo, pero a parte de que no tengo ni idea de como se llama (ni siquiera sé si tiene nombre), estos refugios de trucha 100% de verdad contra más anónimos estén, mejor.

Hoy se abrió la veda en mi querida Zamora, espero que los compis de El Motin de la Trucha tenga un buen dia de apertura, yo desde aquí solo puedo desearles suerte y tenerles envidia sana, si es que eso existe.

7 comentarios:

  1. Bonita jornada y precioso arroyo... El hecho de desmontar la caña para acceder a sus posturas nos da una idea perfecta del entramado del mismo.
    Totalmente de acuerdo en la necesidad de omitir nombres y ubicaciones.. es más ayuda a buscar similitud con alguno de esos arroyos que conocemos o frecuentamos. Encantador.
    Un saludo

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  2. Al igual que Gaizka totalmente de acuerdo en omitir nombres y ubicaciones..
    Una gozada leerte.
    Un abrazo

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  3. Gracias a ambos. Efectivamente Gaizka, la entrada solo pretende hablar de la pesca en un arroyo de pequeño tamaño. Otras veces hablo de zonas conocidas, lsm, cotos, el mar... zonas que no son especialmente vulnerables y supuestamente vigiladas.
    En mi próximo viaje a Zamora me traeré la cañita de linea 3 de 7 pies, para disfrutar de estos pequeños paraisos.

    Un saludo a los dos.

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  4. En Galicia abundan de esos richuelos. A causa de esto nació la pesca a ballesta.
    Algunos de ellos albergan poblaciones de truchas que apenas conocen la presencia humana.
    Por desgracia también los hay que desconocen a la guardería o a los agentes de medio ambiente.
    Es por ellos que se cometen verdaderas atrocidades en ellos.
    A ver si un día podemos ir de pesca juntos, pero no ahí sino a un río de más entidad.
    Un saludo.

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  5. Sin duda es cuando se disfruta de este deporte al 100% cuando buscas la picada donde sabes que la hay y poca gente busca esas zonas, ver un arroyo de esa pureza es de alegrarse, un saludo y conserva tus secretos!!

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  6. Jose, habrá ese día de pesca, aunque no se donde será. El Lerez está en horas bajas, aunque podiamos probar algún coto de la zona baja.

    Vicont, me encantan estos riachuelos o los pequeños rios de montaña, donde sabes que detrás de cada piedra o en cada postura hay una trucha esperándote, eso si, normalmente de pequeño tamaño, pero te alegran el corazón un montón.

    Saludos a ambos

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  7. Quizas habria mas d e una si no fueran del anzuelo a la cesta y si no fueran furtivedas con trasmallos,lejia y corriente electrica .Pero se siguen vendiendo y comprando truchas=dinero;y se siguen comiendoselas aunque sobra otra y mejor comida.quizas...algun dia.saludos.

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